Guillermo Puig, Mario Juliano y Luis Parodi Saravia participaron de la mesa panel en la que expusieron sobre “Selectividad Penal y Nuevos Modelos Penitenciarios”, en un nuevo encuentro del “Programa de Capacitación en Política Criminal” organizado por el Centro de Especialización y Capacitación Judicial del Poder Judicial de Tucumán y la Escuela del CAM.  

La charla que se realizó en el Salón de Usos Múltiples del Palacio de Justicia de Tucumán comenzó con la exposición de Puig sobre “el perfil  de los Niños, Niñas y Adolescentes” sometidos al sistema penal de Tucumán. El  docente de las cátedras de "Criminología" y "Ejecución de Sentencia y Régimen Penal Juvenil" de la Facultad de Derecho (UNT) hizo hincapié en la necesidad de trazar un perfil de los “usuarios” del sistema penal para que “con datos específicos” se tratar a aquellos que ingresan al sistema y para generar políticas públicas de prevención. 

A continuación tomó la palabra el Juez Criminal Nº 1 de Necochea, Mario Juliano, quien se preguntó si a lo largo de los últimos años el país está mejor o peor en cuestiones relacionadas al sistema penitenciario. Para Juliano es fundamental comenzar a resolver los problemas anteriores que llevan a una persona a delinquir, ya que sin ese paso previo será inútil construir mejores servicios penitenciarios.

“Los cambios en el servicio penitenciario no vendrán por parte del Estado ya que por cuestiones presupuestarias no tiene intenciones concretas. El cambio debe venir de adentro en la medida de que el reo se empodere y se hace cargo de su realidad”, explicó Juliano respecto a su mirada sobre las soluciones a los problemas que aquejan a las cárceles y su función en la sociedad. 

Para finalizar el encuentro Luis Parodi Saravia, compartió su experiencia  como Director de la Unidad Nº 6 "Punta de Rieles" del Instituto Nacional de Rehabilitación (Uruguay). Parodi Saravia enumeró una serie de principios con los que se gestiona la “cárcel pueblo” ubicada a 15 kilómetros de Montevideo, entre los que destaca, el considerar la cárcel como un lugar de aprendizaje, en donde además está integrado el control –por la propia naturaleza de un establecimiento carcelario-. 

Parodi, quien es pedagogo, contó que anteriormente en Uruguay las cárceles dependían del Ministerio de Educación y aunque en la actualidad no es así –pasaron a depender del Ministerio del Interior- existen proyectos de ley para que regresen al anterior control de la cartera educativa.